"La Momia Natural más Antigua de Europa"

Su nombre es Ötzi y es la momia humana natural más antigua conocida.

Pertenece a los restos de un habitante de los Alpes Italianos de la edad de Bronce (5300 años de antigüedad), que fue descubierto por el montañista Helmut Simon en 1991. En este caso, la causa de la conservación del cadáver fue la frialdad extrema y perpétua de la región donde el individuo falleció. Es la momia más vieja de Europa y ha ofrecido información sobre el periodo en que vivió.

Ötzi fue encontrado por dos turistas alemanes, Helmut y Erika Simon, el 19 de septiembre de 1991. El cuerpo en un principio se pensó que era de un cadáver moderno, como varios otros que habían sido encontrados en la región. Fue recuperado por las autoridades austríacas y llevado a Innsbruck, en donde su edad verdadera finalmente fue descubierta. Los exámenes subsecuentes demostraron que el cuerpo había sido localizado algunos metros dentro del territorio italiano. Ahora esta en una exhibición en el museo del sur del Tyrol de Arqueología en Bozen-Bolzano, Italia.

A la hora de su muerte, Ötzi medía aproximadamente 160 centimetros de alto y de 40 a 53 años por las estimaciones actuales. El análisis de los granos del polen, del polvo y la composición isotópica del esmalte de los dientes indican que pasó su niñez cerca de la actual aldea de Feldthurns, norte de Bolzano, pero fue más adelante a vivir en valles cerca de 50 kilómetros al norte de dicho lugar. El análisis del grupo de Franco Rollo en la Universidad de Camerino ha demostrado que el ADN mitocondrial de Ötzi pertenece al sub-cluster K1 del grupo haploide mitocondrial K, pero que no puede ser categorizada en tres ramas modernas debido a que es un sub-cluster.

El análisis del contenido intestinal de Ötzi demostró dos comidas (una cerca de ocho horas antes de su muerte), una era de carne de gamuza, otra de carne roja de ciervo, ambas consumidas con algún grano así como algunas raíces y frutas. El grano de ambas comidas era un salvado altamente procesado del trigo de einkorn, consumido posiblemente en forma de pan. Había también algunos huesos de endrino (pequeños ciruelos del árbol del endrino).

El polen en la primera comida demostró que había sido consumido en un bosque de coníferas de altitud media, y otros pólenes indicaron la presencia de trigo y legumbres, que pudieron haber sido cosechas domesticadas. También fueron descubiertos granos del polen del salto-hornbeam. El polen fue preservado muy bien, con el interior de las células intacto, indicando que había estado fresco (pocas horas) en el momento de la muerte de Ötzi. Es interesante remarcar que el trigo del einkorn se cosecha en el verano tardío, y los endrinos en el otoño; éstos se deben haber almacenado desde un año antes.

Los análisis de isótopo de su colágeno del pelo indicaron que Ötzi había sido un vegetariano de por vida (inverosímil, en vista de su comida y del traje), o que había obtenido la mayor parte de su proteína de los mariscos (inverosímiles también, en vista de los lugares en que había vivido según los análisis del esmalte de dientes).

Debido a los cambios de temperatura derivados del transporte del cuerpo, muchos tejidos de Ötzi se estropearon, lo que dificultó posteriores análisis, e imposibilito el conocimiento sobre estos tejidos.

Tenía 57 tatuajes, algunos de los cuales fueron localizados en los puntos cercanos a los utilizados en la acupuntura que hubieran sido utilizados para tratar síntomas de las enfermedades que Ötzi parece haber sufrido, por ejemplo artritis. También fue encontrado el gusano (trichiura) de Trichuris, un parásito intestinal. Algunos científicos encontraron evidencia que la localización de los tatuajes fue seleccionada por razones terapéuticas en un sistema muy similar a la acupuntura moderna.

Las ropas de Ötzi, incluyendo una capa, un chaleco y zapatos tejidos de cuero, eran absolutamente sofisticadas. Los zapatos eran impermeables, diseñado aparentemente para caminar a través de la nieve; fueron construidos usando piel de oso para las plantas del pie, piel de ciervo oculta los paneles superiores y una red hecha de corteza de árbol. La hierba suave circundó el pie y zapato y funcionó como calcetines calientes.

Los zapatos han sido reproducidos por los expertos actualmente y hay planes para la producción comercial. Sin embargo, una teoría más reciente menciona que los zapatos de Ötzi eran realmente la parte superior de sus raquetas de nieve. Según esta teoría, el artículo interpretado actualmente como parte del calzado es realmente el marco y la red de madera de una raqueta.

Entre otros artículos encontrados con el hombre de hielo se encontraban un hacha de cobre con una manija de tejo, un cuchillo del pedernal con una manija de ceniza, una aljaba llena de flechas con los ejes de viburno y las puntas de pedernal y un arco inacabado que era más alto que él.

Entre las posesiones se Ötzi había dos especies de setas. Una de éstas (el hongo del abedul) se sabe tiene características anti-bacterianas, y fue utilizado probablemente para propósitos médicos. El otro era un tipo de hongo de yesca, incluido en un kit complejo. Este contenía diversas plantas que son cerca de una docena, además del pedernal y de la pirita para crear chispas.

Una exploración reveló que Ötzi tenía lo qué parecía ser una punta de flecha alojada en un hombro cuando murió, junto a un rasguño pequeño en su capa. El eje de la flecha había sido quitado, al parecer por un compañero. También tenía contusiones y cortes en sus manos, muñecas, y pecho. Otros rastros revelaron ADN de la sangre de otras cuatro personas: uno de su cuchillo, dos de la misma punta de la flecha y un cuarto en su capa.

Antes de la última evidencia, fue especulado que Ötzi había sido víctima de un sacrificio ritual, quizás de un cacique. Esta explicación estaba inspirada por las teorías sugeridas de los cuerpos del primer milenio AEC recuperados de los pantanos de la turba, como el hombre de Tollund y el hombre de Lindow.

También se presume que Ötzi era la víctima de una tormenta causada por la oscilación de Priora, el refrescarse repentinamente el ambiente de la tierra, según lo indicado por la oleada del glaciar próximo de Priora.

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