La victoria de los Vikingos

Fuente: La voz de Galicia.es

Antes de las 13.00 horas y mientras los barcos vikingos se paseaban delante de las Torres do Oeste -ante el júbilo del público- hubo algunos que no dudaron en ponerse ya a remojo. Y es que en ese momento el calor comenzaba a apretar.





Pero la espera no fue muy larga y casi con puntualidad británica (o habría que decir nórdica por aquello de ser vikingos) los Drakkar desembarcaron en los puntos ya prefijados. La fiesta, que rememora el papel jugado por Catoira en la defensa de Galicia frente a los piratas normandos y sarracenos en busca del tesoro de la Iglesia Compostelana, cobra brío a cada edición que pasa (y ya van 49) y así, con mucha vitalidad, exceso de vino, ganas de pasarlo bien y mojar a cualquiera, se produjo de nuevo el desembarco vikingo.



Después de hacerse paso entre las masas a gritos y con espada en alto…





…se concentraron tierra adentro para gritar victoria (Úrsula) y desmantelarlo todo en su nombre (y, de paso, ponerse de barrantes hasta los cuernos).



El año que viene los vikingos volverán a Catoira, al igual que muchos de los asistentes que no escatiman adjetivos para la cita.

Publicar un comentario

0 Comentarios